Verstappen da una masterclass a los McLaren en la sprint de Spa con Sainz sexto y Alonso decimocuarto

Max Verstappen dio una auténtica masterclass de pilotaje en la carrera al sprint del Gran Premio de Bélgica para llevarse la victoria por delante de Oscar Piastri y Lando Norris. El australiano, líder del Mundial de Fórmula 1 2025, agranda su sequía de triunfos ante el tiburón holandés, que le mordió tras la salida con un brutal adelantamiento y se defendió a la perfección para negarle cualquier intentona.

Es el hombre del momento y el equipo del momento. En la última cita del mes de julio, cuando finaliza su cláusula de salida, en plenos rumores de su posible marcha a Mercedes y con el primer jefe de equipo de Red Bull desde el muro que no es Christian Horner, sino Laurent Meckies, Verstappen impuso su ley como rey del sprint, modalidad en la que ya acumula 12 victorias con la de este sábado.

Gran resultado de Carlos Sainz después de un inicio complicado del GP de Bélgica por un fallo del sistema de combustibles que le obligó a rodar en menos de media hora de entrenamientos. Sexto por detrás de Esteban Ocon en un tren de pilotos despegado de Charles Leclerc, cuarto. Se defendió del otro Haas, Oliver Bearman, y el top 8 de puntos lo cerró Isack Hadjar.

Los Mercedes no llegaron, ni tampoco Lewis Hamilton. Como era de esperar, Fernando Alonso no remontó, quedó decimocuarto y la carrera corta sirvió para probar ajustes a Aston Martin, con Lance Stroll por delante del asturiano.

Un tiburón anda suelto

McLaren no pudo encadenar al depredador de Red Bull y Verstappen firmó un gran adelantamiento sobre Piastri para ponerse líder pasada la curva de Eau Rouge en la primera vuelta. Y simultáneamente, su compañero, Norris, sucumbía ante Leclerc y dejaba sin protección al australiano, que optó por ser conservador y esperar al desgaste de las gomas del holandés para atacar.

No tardó demasiado el británico en recuperar la tercera posición y en la vuelta 4 adelantaba a Leclerc en la recta principal. Sin demasiada acción la prueba alcanzó su ecuador, las ruedas comenzaron a caer en el interminable trazado de Spa y las distancias se abrieron. Sainz luchaba por entrar en zona de DRS con Ocon y Alonso se quedaba rezagado por detrás de Stroll.

Piastri era incapaz de superar la barrera de medio segundo con Verstappen y el holandés, tras su gran hachazo, jugaba con la mente del de McLaren moviendo su Red Bull a la perfección en cada amago de intento del australiano. Y en esas, Norris aceleraba para sumarse a la fiesta a cinco vueltas del final. Con los tres aspirantes al título en fila, el sprint se animó.

Piastri atacó por el interior, Verstappen se defendió de fábula y a Norris le avisaban de cómo se desvanecía la batería de su compañero. McLaren elegía su soldado y era el momento del británico. Detrás, Alonso se defendía de Alex Albon y mantenía una decimocuarta posición que de poco le valía y Sainz se conformaba con un sexto puesto y tres puntos para igualar en la tabla a 16 con su compatriota.

Verstappen se zampa a los McLaren

Los papaya perdieron la batalla con Max, que firmaba una victoria espectacular trabajada durante todo el fin de semana desde los únicos entrenamientos, en los que ya amenazó a los McLaren y sobre todo con un bestial último intento en el shootout que dividió a Piastri y Norris en la parrilla. Estudió su ataque al australiano, lo efectuó, se defendió de los mejores y se embolsa ocho puntazos para seguir en la pelea.